La incidencia del huracán Fiona en el país provocó ayer que algunas entidades activaran su protocolo de emergencia y que advirtieran en todo el territorio nacional acatar las medidas establecidas por el Centro de Operaciones de Emergencia (COE).
Una de las acciones más drásticas fue dispuesta por el presidente Luis Abinader, disponiendo la suspensión de las labores en todas las instituciones de los sectores públicos y privados durante este lunes, debido a los efectos del huracán.
La disposición está contenida en el decreto 536-22, donde se instruyó a los ministerios de Trabajo y de Administración Pública determinar la forma de aplicación de la indicada suspensión en ambos sectores.
Por su lado, el director del COE, Juan Manuel Méndez, reiteró a las familias vulnerables que se encuentran en las localidades en alerta roja y amarilla, a salir obligatoriamente hacia lugares más seguros, como son los refugios habilitados ante el fenómeno atmosférico.
El Plan de Asistencia Social de la Presidencia, que dirige Yadira Henríquez, instruyó a sus comisiones provinciales a continuar la distribución de raciones de comidas crudas en todo el país, priorizando las de alerta roja y amarilla.
Henríquez señaló que desde el viernes han entregado miles de kits alimenticios a las familias más vulnerables de los pueblos que están bajo alerta.
Labores educativas
También el Ministerio de Educación ordenó a la comunidad educativa el cierra de las escuelas públicas y privadas hasta el próximo miércoles.
Mientras que el Ministerio de Educación Superior dio las mismas instrucciones en todas las universidades y los institutos técnicos educativos para salvaguardar la vida de los estudiantes, docentes y personal administrativo.
Las cárceles
Ayer también ante el paso por el territorio dominicano del huracán Fiona, la Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales activó un plan de contingencia para proteger a los privados de libertad y las instalaciones de los recintos, que incluye el traslado de reos que están en centros vulnerables.
En los 41 recintos carcelarios están recluidas 26,651 personas. Algunos centros están ubicados en lugares vulnerables a lluvias e inundaciones, y otros en las zonas donde podría impactar con más fuerza el fenómeno, tras estar incluidas en alerta roja por el Centro de Operaciones de Emergencia (COE). Se ha dado prioridad también a los centros que alojan envejecientes, menores de edad y mujeres.
Hay que tomar en cuenta que los altos niveles de hacinamiento, que llega a una tasa de 65.9, también aumentan los riesgos. La capacidad de ocupación instalada actualmente es para 16,080 personas, pero supera los 26,000, según las estadísticas disponibles.