Santo Domingo.- El Gobierno de República Dominicana calificó hoy de agresivo e infundado un informe sobre los derechos humanos en su país emitido por el Departamento norteamericano de Estado.
Así lo manifestó en un comunicado oficial esta noche el vocero del Ejecutivo y director de Estrategia y Comunicación Gubernamental, Homero Figueroa.
En la tarde de hoy el Gobierno ha tomado conocimiento del extenso Reporte sobre los Derechos Humanos en nuestro país, emitido por el Departamento de Estado de Estados Unidos, afirmó.
«Estamos estudiando el informe y responderemos en el momento oportuno a través de los canales oficiales apropiados», agregó el funcionario en el documento publicado en las redes sociales.
«No obstante, aprovechamos la oportunidad para manifestar nuestro asombro ante el tono agresivo e infundado del informe, que no refleja la realidad actual de los derechos humanos en República Dominicana, ni la estrecha y respetuosa amistad entre nuestros gobiernos», puntualizó Figueroa.
Afirmó que el Gobierno del presidente Luis Abinader reitera su compromiso con el respeto a los derechos humanos «y estamos dispuestos a dialogar constructivamente con nuestros amigos», sobre cualquier preocupación legítima en esta área.
Este lunes medios de prensa locales hicieron referencia a la mención de República Dominicana en el informe anual sobre la situación de los derechos humanos en el mundo publicado por Washington.
De acuerdo con ese organismo, en esta nación se registraron «cambios significativos” en la situación de derechos humanos debido a la «expulsión masiva” de haitianos, independientemente de sus reclamos de estatus legal.
Estados Unidos consideró que el cierre de la frontera con Haití por parte del gobierno en septiembre de 2023 y la posterior suspensión de la emisión o renovación de permisos de residencia, visas y certificados de solicitud de asilo para migrantes haitianos y personas de ascendencia haitiana, incluidos apátridas, colocaron a poblaciones que ya eran vulnerables en mayor riesgo.
El informe de 2023, emitido de manera unilateral por la Casa Blanca sobre prácticas de derechos humanos de otros países, fue presentado este lunes por el secretario de Estado Antony Blinken.