Con tambores, algarabía y entusiasmo, el expresidente del Senado, Ramón Albuquerque, presentó ayer su precandidatura presidencial por el Partido Revolucionario Moderno (PRM), sumándose a Guido Gómez Mazara, el segundo dirigente que ha expresado su interés por dirigir el país en los próximos años.
Al hacer pública su decisión de aspirar a la presidencia de la República por el mismo partido, ambos aspirantes han expresado su descontento con la actual gestión, elaborando sus propias propuestas para materializarlas en un futuro.
Alburquerque señaló que erradicar la entrada de haitianos ilegales por la frontera siempre ha sido un tema político que no ha sido solucionado por falta de herramientas sino de dejadez.
Añadió que no es posible “que un gobierno se promocione como líder económico ante el mundo y tenga los salarios más bajos y la gente cayéndose a pedazos, porque en su mayoría prosperan las empresas, pero no los empleados”. Agregó que el lanzamiento de su candidatura debe de ser evaluado por el pueblo dominicano, que “tendrá otro presidente, si así lo decide, aprobando sus propuestas de gobierno”.
Dijo que aunque no había “empleados de alta jerarquía del gobierno del PRM”, lo acompañaba “la base”, quienes lograron posicionar al gobierno en el poder.
Crítica política económica
Alburquerque, en su discurso, se refirió a la proyección y posición económica que presume la actual gestión, la cual consideró como absurda, debido a que los ciudadanos están “cayéndose a pedazos”.
Durante el evento, que se celebró en el hotel Barceló de la capital, aseguró que le ganaría al presidente Luis Abinader, y citó como parte de sus propuestas, resolver el problema haitiano, demostrar justicia y que se defiendan los recursos naturales, además de oportunidades para los jóvenes que no tienen experiencia.