Más de 500 productos pudieran afectarse con la medida, de ser adoptada, puesto que aún se mantiene como proyecto debido a que implicará una alta inflación a la población haitiana que tiene en República Dominicana a su mercado más cercano para el abastecimiento de productos de la construcción como las varillas y el cemento y a la mayoría los alimentos que consumen, entre los que se incluyen 23 a los que impuso una veda.
Al respecto, el vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), César Dargam, que en un momento fue vicecanciller para Asuntos Económicos y Negociaciones Comerciales del país, en el Ministerio de Relaciones Exteriores, reconfirmó que Haití notificó a la Organización Mundial del Comercio (OMC) en 2017 la intención de modificar sus aranceles.
La medida fue justificada asumiendo las concesiones que figuran en la lista XXVII-Haití, como parte de los procedimientos establecidos en el GATT de 1994, explicó.
“Según lo que se proyecta, su intención es equiparar los aranceles a los del Caricom, lo cual podría implicar aumentos hasta el doble de lo actualmente aplicado”, explicó Dargam, al recalcar que sin lugar a dudas esto se traduciría en un alza de precios para los consumidores haitianos y en una promoción del comercio ilícito (contrabando).
De acuerdo con el vicepresidente ejecutivo del Conep, el sector privado está muy preocupado con esta situación. “Esperamos que el proceso de diálogo pueda traer consigo resultados mutuamente beneficiosos”, indicó.