Así cuentan vecinos de Yoselín, la joven que su pareja Nilcio de Jesús Fortuna, de 56 años, le quitó el sueño de vivir e ir a la universidad.
El homicida-suicida era un reconocido gallero y agricultor que también se desempeñó como encargado del cementerio.
Vecinos y familiares de la joven contaron que tenía poco tiempo que había establecido una relación sentimental informal con ese hombre y que en ocasiones compartían.
Los testigos narran que el viernes salieron a compartir, pero que el sábado en la madrugada discutieron por razones aún no especificadas por las autoridades.
Según la versión de los hechos, la joven en medio de la discusión trató de escapar, por lo que De Jesús Fortuna le disparó con una escopeta por la espalda y luego se suicidó de un cartuchazo en la cabeza.