El gobierno del presidente Donald Trump formalizó el jueves las nuevas directrices para recomendar que los estadounidenses se cubran el rostro en un intento por frenar la propagación del coronavirus.
Las recomendaciones, a las que se les están dando los últimos detalles, serían aplicables a aquellos que viven en zonas que se han visto azotadas por una transmisión comunitaria del virus que provoca la enfermedad COVID-19.
Una persona familiarizada con las conversaciones del grupo de trabajo del coronavirus de la Casa Blanca dijo que las autoridades sugerirían que se utilicen mascarillas no médicas, camisetas o pañuelos para cubrir la nariz y boca cuando se salga de casa, como cuando se va al supermercado o la farmacia. Las mascarillas de grado médico, sobre todo las N95 que escasean, estarían reservadas para aquellos que atienden directamente a los enfermos.
La persona habló a condición de guardar el anonimato para poder declarar sobre las directrices propuestas antes de su publicación.
Trump, que volvió a ser examinado para ver si tiene el coronavirus utilizando una nueva prueba rápida, señaló que apoyaría una recomendación de ese tipo.
“Si la gente quiere usarlas, puede hacerlo”, manifestó.
Hace algunos días, el mandatario había dicho que no era “una mala idea, por lo menos durante algún tiempo”.
La prueba de Trump arrojó un resultado negativo en 15 minutos, señaló la Casa Blanca, e indicó que el presidente está “saludable y sin síntomas”.
El vicepresidente Mike Pence también anunció el jueves que la residencia presidencial estaba sopesando dar pagos directos a hospitales para cubrir los costos del tratamiento del COVID-19 en estadounidenses sin seguro de salud.
Las incipientes directrices en torno a las mascarillas parecían ser más limitadas que las incluidas en un borrador de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, que sugiere que la recomendación sea aplicable a casi todos los estadounidenses en todo el país, de acuerdo con un funcionario federal que ha visto el borrador, pero no está autorizado para hablar sobre él.
Se prevé que las autoridades limiten su alcance geográfico a únicamente las regiones donde el virus se está propagando rápidamente, añadió el funcionario. El anuncio oficial está previsto para el viernes.
Según las directrices anteriores, sólo los enfermos o aquellos en alto riesgo de complicaciones por la enfermedad respiratoria debían usar mascarillas. La nueva propuesta fue impulsada por una investigación que mostró que algunas personas aparentemente saludables están propagando infecciones.
Las conversaciones sobre las mascarillas se dieron mientras la Casa Blanca se movilizaba agresivamente para defender su manejo de la pandemia del coronavirus, sobre todo sus esfuerzos para acelerar la distribución de respiradores y del equipo de protección que necesitan los profesionales médicos.