NUEVA YORK.- Cuando tenía 18 años de edad, en 1992, el dominicano Freddy Guerra participó junto a dos compañeros en un atraco en una ferretería de Queens, donde robaron dinero en efectivo y 40 latas de pintura de aerosol (spray), y cuando el propietario, Lie Zaban de 68 años, los enfrentó, Guerra le disparó en el mentón, dejándolo grave.
El ferretero, logró sobrevivir al balazo. Guerra, fue detenido posteriormente y se le fijó una fianza de $50.000 dólares en la Corte Criminal de Queens en 1993, después de declararse culpable en diciembre de 1992 por tentativa de homicidio y posesión criminal de un arma.
Él disparó al propietario de la ferretería, en medio de una discusión por varias latas de pintura de aerosol (spray), y debía regresar al tribunal el 3 de febrero de 1993 para ser sentenciado. Fue condenado en contumacia (en ausencia) a 18 años de prisión.
Pero huyó ese mismo año a la República Dominicana, escondiéndose sin ser ubicado por las autoridades. Hace dos semanas, solicitó un pasaporte nuevo con el propósito de venir a Nueva York a visitar familiares.
Cuando llegó al aeropuerto internacional John F. Kennedy el martes de la semana pasada, Guerra fue arrestado y entregado a la policía, siendo procesado en la corte, donde será sentenciado el 14 de junio.
Enfrentaba una sentencia de hasta 25 años en la cárcel, pena que le podría ser aumentada por desacato, violación de la condición de la fianza y evasión de la justicia.
Las autoridades dijeron que durante los 25 años que estuvo prófugo, vivió en la República Dominicana.
Detectives de homicidios y oficiales de los US Marshalls (alguaciles de Estados Unidos) lo pusieron en custodia en el aeropuerto.
La policía recordó que Guerra y los otros dos sospechosos entraron a la ferretería situada en la avenida Willie, cerca de la autopista Horace Harding Expressway y la calle 159 en Kissena (Queens) el 16 de septiembre de 1992.
Un mes después, la policía capturó a Guerra y un cómplice de 14 años. Ambos fueron acusados por intento de asesinato.
El ferretero murió en 2015 a los 91 años de edad por complicaciones de salud.
Zaban compró la tienda unos años después de otro atraco en la misma ferretería que tenía una dueña judía.
La viuda de Zaban, Lea, que vive en Pensilvania, se negó a hablar del tiroteo.
Cuando se le contó sobre el arresto de Guerra, ella dijo que “eso está bien”.
Está recluido en la cárcel de Rikers Island en Queens, hasta su próxima presentación ante el juez.