Con esta declaración del estado de emergencia, Trump autorizó a la Agencia Federal para la Gestión de Emergencias (Fema, por sus siglas en inglés) a destinar recursos federales para “aliviar las dificultades y el sufrimiento causado por la emergencia en la población local”.
La Fema también tiene la instrucción de “salvar vidas, proteger la propiedad, la salud y seguridad pública”, así como “disminuir o evitar la amenaza de una catástrofe”. Además, la declaración detalla que el Gobierno de EE.UU. se hará cargo del 75 % del costo de las medidas preventivas de emergencia como las evacuaciones y los albergues.
La declaración de Trump llega después de la adoptada también ayer miércoles por la gobernadora de Puerto Rico, Wanda Vázquez, que además activó la Guardia Nacional.
Vázquez visitó ayer varios lugares estratégicos relacionados con la emergencia meteorológica como hospitales, el centro de operaciones de emergencias y una planta de la red eléctrica estatal.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) de EE.UU. indicó en un actualización de las 22.00 GMT que este potencial ciclón, el número 9, avanza hacia las Islas Vírgenes, Puerto Rico, República Dominicana y Haití.