Martinelli, de 66 años y extraditado por Estados Unidos el pasado 11 de junio, fue llevado al estatal Hospital Santo Tomás la noche del lunes, después de que terminó una nueva sesión de la audiencia de fase intermedia o acusación por la causa de las interceptaciones ilegales, informaron sus defensores.
«Cuando terminó la audiencia se le practicó un examen, ese examen determinó irregularidades no solo a nivel de presión sino en su ritmo cardíaco, y en virtud de eso se decidió trasladarlo directo al hospital para hacer unas evaluaciones», dijo el defensor Luis Eduardo Camacho (hijo) a los periodistas.
La exprimera dama Marta Linares publicó en su cuenta de Twitter que el cardiólogo del expresidente «había recomendado audiencias cortas por su condición coronaria», pero la del lunes se extendió «14 horas» con un «receso 3 horas».
«Todos se van a almorzar y a RM (Ricardo Martinelli) lo dejan sentado en 1 silla. Si le pasa algo a RM caerá sobre la conciencia (de Jerónimo) Mejía», el magistrado juez de Garantías de la causa por las escuchas, añadió la esposa del expresidente.
Martinelli estuvo en junio pasado hospitalizados por una crisis de hipertensión dos días en el Santo Tomás, a donde fue llevado el mismo día que llegó extraditado por Estados Unidos, donde estuvo preso un año en una cárcel federal.
La semana pasada el magistrado juez de Garantías acortó una de las sesiones de la audiencia intermedia debido a que el ex jefe del Estado presentaba diarrea y un problema con una muela.
El magistrado fiscal del caso, Harry Díaz, se quejó el pasado 25 de junio de que Martinelli, que en esos momentos cumplía supuestamente una huelga de hambre, «se induce a sí mismo» la desmejora física «con la falta de toma de medicamentos» para controlar sus condiciones crónicas.
Mejía dijo que este martes se reanudaría la audiencia intermedia, en la que el lunes Díaz sustentó su escrito de acusación contra el expresidente, para el que pide 21 años de cárcel: 4 por el delito de interceptación de telecomunicaciones sin autorización judicial; 4 por persecución y vigilancia no autorizadas; 10 por peculado por sustracción o malversación; y 3 años por peculado de uso.
El juez reunió este martes a las partes y decretó la suspensión de la audiencia hasta que forenses de medina legal o médicos tratantes confirmen el estado de salud del exmandatario, quien pasado el medio día de hoy seguía hospitalizado en el Santo Tomás.
Martinelli está detenido en la cárcel de mínima seguridad El Renacer, en la periferia norte de Ciudad de Panamá, y de acuerdo a los términos de la extradición, aprobada bajo el principio de especialidad, solo puede ser procesado en Panamá por las escuchas, una de la cerca de 10 causas penales abiertas en su contra.