El Ministerio de Salud Pública emitió un aviso sobre la circulación de las cepas del COVID-19 en el territorio nacional.
Conforme los datos arrojados por la institución, se han identificado cuatro variantes B.1.1.7 (Reino Unido), B.1.351 (Sudafrica), P.1 (Brasil) y B.1. 617 (India), debido a su alta transmisibilidad, gravedad, capacidad de neutralización de anticuerpos y los impactos potenciales sobre la efectividad de las vacunas con el coronavirus.
B.1.1.7: Esta variante se dectetó por primera vez en el Reino Unidos. Presenta un 50 por ciento de aumento de transmisión, aumenta la gravedad en función de las hospitalizaciones y las tasas de letalidad.
Sin embargo, no presenta un impacto en la susceptibilidad a los tratamientos con anticuerpos e impacto mínimamente por sueros convalencientes y post- vacunación.
La segunda es de Brasil (P.1): Se identificó inicialmente en viajeros de ese país, que fueron evaluados durante un control de rutina en un aeropuerto de Japón, a principios de enero. Presenta una disminución significativa de la susceptibilidad a la combinación del tratamiento con algunos anticuerpos monoclonales e impacta mínimamente en la neutrazación por sueros convalecientes y post- vacunación.
Variante Sudafricana B.1.351
El 18 de diciembre de 2020, Sudáfrica anunció la detección de una nueva variante perteneciente el linaje B.1.351 y denominada 501Y.V2, debido también a la mutación N501Y. Esta mutación también está presente en la variante B.1.1.7.
Transmisibilidad y letalidad: aunque los datos genómicos demuestran que esta variante ha desplazado rápidamente a los demás linajes que circulan en ese país y los estudios preliminares apuntan a que está asociada con una mayor carga vírica, se continúan estudiando estos y otros factores que puedan afectar a esa capacidad. Por el momento, no hay evidencias de mayor virulencia.
Resistencia a la vacuna: según informa el CCAES, algunos estudios muestran una disminución de la capacidad de neutralización de sueros de pacientes convalecientes por lo que preocupa que pueda producir un mayor número de reinfecciones o reducir parcialmente la eficacia de las vacunas.
Otra cepa es B.1.617, también conocida como VUI (Variant Under Investigation)-21APR-01,1 corresponde a una variante del SARS-CoV-2, el virus que causa el COVID-19. Fue inicialmente identificada en el estado de Maharashtra en India, el 5 de octubre del 2020 de acuerdo al profesor Sharon Peacock,2 y es una variante con doble mutación.3456 Esto último se refiere a que existen dos mutaciones a nivel de la glicoproteína de la espícula viral (spike)7 (E484Q y L452R).8
B.1.617 tiene al menos 15 mutaciones, con dos mutaciones específicas en la proteína de pico que lo definen:9
E484Q. La mutación en la posición 484, un ácido glutámico-a- sustitución deglutamina, confiere la variante más fuerte potencial de unión a hACE2 (el receptor humano ACE2), así como una mejor capacidad para evadir el sistema inmunológico de los huéspedes, a B.1.617 en comparación con otras variantes.
L452R. La mutación en la posición 452, una sustitución de leucina-a-arginina, confiere una mayor afinidad de la proteína de pico para el receptor ACE2 y una menor capacidad de reconocimiento del sistema inmune.
Cada una de estas dos mutaciones tomadas por separado no es exclusiva de esta variante, pero la aparición de ambas en la misma variante es única para ella.
Otra mutación del coronavirus detectada es la B.1.575, la cual es la más presente en el territorio nacional, de acuerdo los datos de Salud Pública, acompañado del aviso: “Nuestro Ministerio a través de la Dirección General de Epidemiología (DIGEPI) emite un aviso sobre las circulación de nuevas variantes de SARS-COV-2 en territorio dominicano”.