Tras la reciente alerta epidemiológica de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) por los casos de cóleras reportados en Haití el 2 de octubre del año en curso, la Sociedad Dominicana de Pediatría recalca su llamado a la población para mitigar riesgos, mediante medidas de saneamiento y otras recomendaciones de higiene y cuidado de los alimentos para conservar la salud.
El cólera es una enfermedad diarreica aguda causada por la ingestión de alimentos o agua contaminados con el bacilo Vibrio cholerae.
Hace más de 3 años que no se reportaban casos de cólera en la zona, pero la reciente alerta ha retomado el tema en la palestra para sensibilizar sobre el cuidado oportuno de zonas vulnerables para evitar casos, debido a la alta migración cotidiana de haitianos a territorio dominicano.
De acuerdo con los datos de la Organización Mundial de la Salud, la clave para controlar el cólera y reducir el número de muertes consiste en adoptar un criterio multidisciplinario basado en la vigilancia, el agua, el saneamiento y la higiene, la movilización social, el tratamiento y la vacunación oral.
La doctora Herrera considera esencial reforzar nuestro sistema nacional de vigilancia epidemiológica, tanto locales como de reportes que se puedan adquirir del país vecino, para estar preparados y contrarrestar casos de ser necesario.
Para las familias, recomendó: Acudir inmediatamente al servicio de Salud más cercano si presenta diarrea líquida que parece “agua de arroz”, iniciando tratamiento con sueros de hidratación oral cuanto antes; notificar la ocurrencia de casos en el hogar o en su comunidad a las autoridades de Salud Pública de su provincia; seguir las recomendaciones generales y específicas sobre la prevención y sintomatología del cólera emitidas por el Ministerio de Salud Pública; así como cumplir las pautas para el lavado de manos después de ir al baño y antes de cada comida.
Anadió que las personas que cuidan enfermos con diarrea, deben lavarse las manos frecuentemente, especialmente después del contacto directo o indirecto con heces, antes de preparar alimentos, antes de comer y antes de alimentar niños, personas mayores, o cualquier adulto convaleciente; asi como en zonas vulnerables, defecar en inodoro o letrina y evitar hacerlo en lugares abiertos.