Cayó el segundo y con una dosis parecida, aunque con un resultado no tan abultado, pero con el común de una buena salida monticular con matrícula cubana. Si el jueves fue Yunesky Maya quien limitó los bates taurinos el viernes el turno fue para Néstor Cortés.
Cortés trabajó seis entradas en blancos donde solo aceptó tres imparables, con dos bases y tres ponches, y el bateo de las Estrellas volvió a ser oportuno para imponerse 6-1 a los Toros para colocarse 2-0 en ventaja en la serie final.
El madero de José Sirí siguió caliente y sus piernas veloces. El monteplatense de los Gigantes que refuerza a los verdes pegó un par de imparables y anotó una vuelta, mientras que Fernando Tatis III anotó dos veces, se robó un par de almohadillas y remolcó una.
Fueron siete hits bien combinados con cuatro boletos y un error que fueron manufacturados en carreras.
Para Paolo Espino, el perdedor, será un partido que el frío box scorenunca dirá toda la verdad. El derecho panameño silenció los bates petromacorisanos durante cuatro entradas donde solo toleró un boleto y le propinó nueve ponches, siete de ellos de forma seguida. Fue en el quinto cuando cedió el primer hit, pero ya en esa etapa se le había acabado la gasolina.
La ofensiva romanense volvió a estar ausente y en 18 entradas solo ha anotado dos vueltas, 10 hits, de ellos solo un extrabase.
El tercer partido tendrá lugar la noche del sábado a partir de las 7:30, en el estadio Tetelo Vargas de San Pedro de Macorís.
Las Estrellas, que buscan frenar una cadena de casi 51 años sin levantar el trofeo, también ganaron los primeros dos partidos a los Gigantes del Cibao en 2015, su anterior visita a la final, pero el equipo nordestano remontó y se impuso 5-3.
La definición
Pero la magia de Espino terminó en el quinto. Comenzó la entrada otorgando boleto a Junior Lake, que avanzó a segunda con rodado por la intermedia del venezolano Héctor Sánchez y el también bolivariano Daniel Mayorga le rompió el no hit con imparable productor al derecho.
En el sexto, los bates verdes ya le habían tomado la medida a Espino y atacaron con tres vueltas que llevó tranquilidad a la cueva elefante. Sirí abrió con sencillo al jardín izquierdo, Gustavo Núñez le siguió con inatrapable al derecho y luego se robó la segunda, Fernando Tatis III disparó hit remolcador al central, lo que decretó la salida del montículo del derecho panameño.
Subió a lanzar Jhan Maríñez, que de inmediato vio cómo Tatis III se le robaba la segunda e hizo un lanzamiento salvaje que permitió a Núñez anotar desde la antesala. Miguel Sanó falló con rodado al campo corto, pero Jiménez sacó rodado por segunda que Alexi Casilla prefirió hacer el out en la inicial y entró la cuarta raya.
La visita volvió a encontrar un hueco en el séptimo y no lo desaprovechó para pisar la goma. Ramón Ramírez subió al montículo y dominó a Sánchez y Mayora con línea a primera y elevado al central. Pero Tomás le pegó hit al derecho, Sirí sorprendió con toque lento que Ramírez recogió e hizo un lanzamiento salvaje a primera que se incrustó en la zona foul y Tomás anotó sin problema.
En el octavo, por cuarta entrada al hilo, los paquidermos volvieron a anotar. Tatis III fue transferido por Rodolfo Martínez, se robó la intermedia y llegó al plato con sencillo al izquierdo de Lake.
La vuelta taurina llegó en el octavo. Carlos Franco pegó hit al izquierdo y anotó aprovechando un wild pitch de Wirfin Obispo, que el receptor Héctor Sánchez lanzó mal a la antesala.
La derrota puso fin a una racha de los Toros de seis victorias consecutivas en casa en Series Finales.
Por las Estrellas, que conectaron siete hits, Daniel Mayora bateó de 4-1 y una remolcada; Junior Lake se fue de 3-1, una anotada, una impulsada y recibió transferencia, Fernando Tatis Jr, de 2-1, dos anotadas, una remolcada y un boleto, Héctor Giménez impulsó una vuelta y José Sirí, de 3-2, una anotada y ujna transferencia.
Por los Toros, que pegaron seis imparables, Félix Pie, de 4-1, Chris Roberson bateó de 3-2 y recibió un boleto, Carlos Franco se fue de 3-1 y una anotada, Juan Apodaca, de 3-1 y Anderson Feliz, de 1-1 y una transferencia.