SANTO DOMINGO.- Varios miembros del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) se pronunciaron este miércoles en torno al trato que debe dar ese organismo a los casos de corrupción y señalamientos de que son objeto dos de los altos dirigentes de la organización
Los miembros del máximo organismo de dirección peledeísta Cristina Lizardo, senadora ante el Congreso Nacional y Lidio Cadet titular de la Dirección General de Ética e Integridad, Gubernamental (DIGEIG) consideraron pertinente que ese organismo se reúna analice los casos en los que están implicados los secretario de Organización y de Finanzas del PLD Félix Bautista y Víctor Díaz Rúa y den una respuesta a la población.
Cadet consideró que la situación debe de llamar la atención de la dirección del PLD.
Mientras que Cristina Lizardo estimó que debe ser dentro del partido oficialista que se diluciden sus problemas.
Al ser preguntada sobre la petición del exministro Francisco Domínguez Brito para que el senador Bautista sea separado de su cargo de secretario de Organización y Díaz Rúa de la secretaría de Finanzas del partido morado, Lizardo reiteró que la situación del PLD debe dilucidarse a lo interno del mismo.
En tanto que la vicepresidenta de la República, Margarita Cedeño, quien también forma parte del Comité Político, dijo dejar en manos de ese órgano de dirección peledeísta el destino de los altos dirigentes que pertenecen a esa organización que incurran en actos de corrupción o que sean sancionados por la justicia.
Víctor Díaz Rúa está implicado por la Procuraduría General de la República en los casos de sobornos realizados por la multinacional brasileña Odebrecht en el país para obtener la concesión de obras del estado.
En tanto que el senador por San Juan Félix Bautista fue sancionado por el Gobierno de Estados Unidos por alegada practica de corrupción en Haití tras el terremoto.
Entre las naciones anunciadas por los Estados Unidos contra Bautista están la supresión del visado a él y a sus familiares más cercanos, la congelación de sus bienes y la prohibición de relaciones comerciales a sus ciudadanos.
El Gobierno norteamericano a través de la Oficina para el Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés), acusa al senador Bautista de usar su posición para incurrir en corrupción, incluyendo lucro con esfuerzos humanitarios relacionados a la reconstrucción en Haití.