Santo Domingo (EFE).- Una persona está desaparecida, al menos 1.522 fueron desplazadas de sus hogares y un puente colapsó debido a las intensas lluvias en la República Dominicana, que han llevado a las autoridades a decretar la alerta en 30 de las 32 provincias del país, 13 en nivel rojo.
Fuertes aguaceros, tormentas eléctricas y ráfagas de viento continúan produciéndose en varias provincias del país desde primeras horas del día, fenómenos asociados a un disturbio tropical sobre la porción oriental de Cuba, vinculado a una vaguada en varios niveles de la atmósfera.
Una de las provincias más afectadas por las precipitaciones es San José de Ocoa, donde colapsó el puente 16 de agosto del municipio de Sabana Larga, dejando una persona desaparecida, informó el Centro de Operaciones de Emergencias (COE).
La carretera que conduce al municipio está completamente anegada por el desbordamiento del cauce del río Ocoa y la vía resulta intransitable, según pudo comprobar EFE.
Otras provincias especialmente afectadas por las lluvias son Azua, donde las inundaciones han obligado a desplazar a cientos de personas, al igual que en Sánchez Ramírez, mientras que en Duarte y Monte Plata hay varias comunidades incomunicadas por la crecida de ríos.
En María Trinidad Sánchez, Santiago y San Cristóbal también se registraron inundaciones en viviendas y daños en infraestructuras a causa de las aguas torrenciales que no han cesado en toda la jornada.
A pesar de no ser un evento extremo, debido a la saturación del suelo por las lluvias caídas y las que están por llegar, las autoridades han tomado las previsiones de lugar, pero la población también debe seguir las directrices de carácter preventivo, dijo el director del COE, Juan Manuel Méndez Méndez, que instó a la prudencia, especialmente en las zonas más vulnerables.
El ministro Administrativo de la Presidencia, José Ignacio Paliza, secundó el llamado a la prudencia y destacó las acciones tomadas por el Gobierno “para que los efectos de esas aguas no sean tan notorios como en otras oportunidades”, y se han emitido “las alertas de lugar”, de modo que los organismos de emergencia e instituciones están preparadas “para mitigar los efectos de este fenómeno».
El funcionario señaló que ya hay reportes de “afectación en materia de infraestructura vial”, pero cuando cesen las lluvias harán “un mejor perfil de sus daños y de cuál es la manera más oportuna de atender a la gente».
Las provincias en alerta roja por posibles inundaciones repentinas urbanas y rurales, crecidas de ríos, arroyos y cañadas, así como deslizamientos de tierra son Santo Domingo, Distrito Nacional, Pedernales, San Juan, Barahona, Azua, San José Ocoa, Bahoruco, Independencia, Elías Piña, San Cristóbal, Peravia y Sánchez Ramírez.
En alerta amarilla se encuentran Monseñor Nouel, Espaillat, Dajabón, Monte Plata, La Vega, Samaná, María Trinidad Sánchez, El Seibo, Hato Mayor, La Romana, San Pedro de Macorís y Duarte, mientras que en alerta verde están Santiago Rodríguez, La Altagracia, Puerto Plata, Hermanas Mirabal y Santiago.
En cuanto a las condiciones marinas, se recomienda a los operadores de las frágiles, pequeñas y medianas embarcaciones del sector de la costa Atlántica que va desde Punta Mangles (El Seibo) hasta Punta Aljibe (La Altagracia) mantenerse en puerto debido a vientos y olas anormales.
En el resto de la costa Atlántica y toda la costa caribeña, deben navegar con precaución sin aventurarse de Marzo adentro, debido a vientos y olas anormales y tomar la debida cautela por las fuertes lluvias, ráfagas de vientos frecuentes y tormentas eléctricas, según las previsiones.