Puerto Príncipe (EFE).- Las embajadas y representaciones diplomáticas en Haití están tomando medidas ante la escalada de la violencia, principalmente en la zona de Puerto Príncipe, desde evacuaciones de su personal a restricciones o suspensiones temporales de sus servicios.
Este lunes, la Unión Europea informó de que ha evacuado a todo su personal en Haití “a un lugar más seguro fuera del país”, ante el “dramático deterioro de la situación de seguridad”, y señaló que, en función de cómo esta se desarrolle, se ajustará la forma en que la UE operará en territorio haitiano.
La decisión de la Unión Europea se produce después de que en la noche del sábado militares estadounidenses se desplegaran en Puerto Príncipe para reforzar la seguridad de su Embajada, a fin de garantizar que siga funcionando, y para evacuar al personal no esencial, con el visto bueno personal del presidente de EE.UU., Joe Biden.
También varios miembros de la Embajada de Alemania en Haití fueron evacuados a República Dominicana el domingo, como confirmó a EFE una fuente del Ministerio dominicano de Defensa que pidió el anonimato.
En televisiones locales pudieron verse imágenes supuestamente de personal alemán que se acercaba a un helicóptero en una zona donde ondeaba la bandera dominicana.
Un día antes, altos mandos militares y autoridades civiles de la vecina República Dominicana habían sostenido una reunión para, en caso de ser necesario, ejecutar la evacuación de emergencia vía aérea desde Haití de funcionarios dominicanos y de “hermanas naciones».
Cierres al público y recomendaciones a sus ciudadanos
En general, el resto de embajadas y representaciones en Haití ha tomado medidas y ha cerrado, reducido o aplazado sus servicios.
Así, la delegación francesa comunicó que, por precaución, los servicios de visados y de gestiones administrativas están cerrados al público hasta el 15 de marzo, una medida que se prorroga después de que en principio se previera reanudar la actividad este lunes.
También la Embajada de España suspendió este lunes su servicio al público, según su cuenta de X, e indicó que las citas fijadas para esta jornada han sido aplazadas y serán concertadas de nuevo.
En el mismo sentido, la legación de México en Haití avisó de que, “debido al estado de alerta que prevalece” en Puerto Príncipe, estepermanecerá cerrada y las personas citadas para algún trámite serán recibidas en fechas posteriores.
Ya la semana pasada, la Embajada de Canadá anunció que estaba cerrada temporalmente al público y que, aunque se cancelaban las citas, las operaciones continuaban. También la misión de Estados Unidos “sigue abierta”, aunque la violencia le ha llevado a reducir sus operaciones, además de evacuar al personal no esencial.
Todas las representaciones diplomáticas en Haití llevan días recomendando a sus nacionales que extremen las precauciones y eviten los desplazamientos no esenciales, entre otros consejos.
Desde hace diez días, la violencia se ha incrementado en Haití a mano de las poderosas bandas armadas que controlan gran parte de Puerto Príncipe y otras zonas del país y que en estas jornadas han atacado instituciones, empresas públicas y privadas o cárceles, lo que ha permitido la huida de al menos 3.000 presos, entre ellos miembros y cabecillas de esas pandillas.
El viernes pasado trataron de tomar el Palacio Nacional, pero fueron repelidas por las fuerzas de seguridad, y también fracasaron en sus intentos de incendiar el Ministerio del Interior.
Las bandas exigen la salida del poder del primer ministro de Haití, Ariel Henry, quien se encuentra en Puerto Rico después de estar varios días en paradero desconocido y sobre quien aumentan las presiones tanto dentro como fuera del país para que favorezca una transición que ayude a frenar la aguda crisis y la extrema violencia en la nación isleña.
Precisamente este lunes la Comunidad del Caribe (Caricom) celebra una reunión en Jamaica, junto al secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken; la canciller mexicana, Alicia Bárcena, y representantes de la ONU, Francia y Canadá, para intentar avanzar hacia esa transición política.
Haití sigue a la espera del despliegue de una misión multinacional de apoyo a la seguridad liderada por Kenia y que en octubre pasado aprobó Naciones Unidas.