Un cielo opaco y grisáceo por concentraciones del polvo proveniente de Sahara, se percibió este lunes en el Gran Santo Domingo y otras ciudades del país, cuyo patrón meteorológico persistirá este martes, de acuerdo al informe emitido por la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet).
En medio de la pandemia del COVID-19 que afecta el país, las personas procuran más que nunca proteger sus vías respiratorias, sin embargo, estos fenómenos resultan contraproducentes para la salud.
De acuerdo al neumólogo David Mejía, estas partículas de polvo, afectan más a los pacientes que presentan condiciones respiratorias como asma u obstrucciones crónicas, que son las enfermedades producidas por fumar o el humo de leña.
Mientras que en otros que no padecen problemas respiratorios, podría ocasionar rinitis, alergia en los ojos o afecciones en la piel, explica el especialista de la salud.
Con relación a los síntomas que desencadenaría esta concentración de polvo en algunos, el experto advierte que podría guardar cierta similitud con las del COVID-19, pero aclara a la vez, que es fácil de diferenciar.
“Si algún paciente hace una rinitis, cuando haces la inflamación puedes percibir que tienes por la irritación, congestión nasal o sentir anosmia (pérdida del olfato), no como tal, sino una leve disminución que por la inflamación pudiera pasar”, puntualizó Mejía.
Recomendaciones de los expertos
En estos días, independientemente de que padezcas de alguna condición respiratoria o no, los especialistas recomiendan que, por la llegada de la extensa y densa nube de polvo del Sahara, no salgas, si no es necesario.
Recomiendan permanecer en los hogares, ya que las personas podrían comenzar a sentir el pecho apretado, dolor de garganta, ardor en los ojos y falta de aire.