El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, afirmó que se ha producido un “grave incidente” en las medidas nacionales para hacer frente a la “crisis sanitaria global”, según recogen hoy los medios nacionales, que no dan más detalles del tema.
El dictador norcoreano se refirió así a la situación del país en su lucha contra la pandemia, y después de que el régimen haya señalado que no ha registrado ningún caso de COVID-19 y aplicado estrictas restricciones fronterizas que afectan al comercio y al movimiento de personas para evitar la introducción del virus.
“Al descuidar importantes decisiones del partido en su emergencia nacional para luchar contra el virus en preparación para una crisis sanitaria global, oficiales a cargo han causado un grave incidente”, señaló Kim durante una reunión del politburó del partido único norcoreano celebrada en la víspera y recogida hoy por la agencia estatal KCNA.
Dicho incidente “supone una enorme crisis para la seguridad de la nación y de su pueblo”, dijo el líder supremo norcoreano durante la reunión del politburó del Partido de los Trabajadores, el máximo órgano de gobierno del país.
Kim señaló la ‘incapacidad e irresponsabilidad’ de los altos oficiales del régimen como “factor principal que obstaculiza la ejecución de tareas importantes”, y añadió que la “lucha” a nivel del partido “debe llevarse a cabo contra defectos ideológicos y otros tipos de factores negativos”.
La KCNA mencionó que durante la reunión del politburó se discutió un “informe” sobre dichos errores, aunque no dio más detalles del incidente ni de la situación del coronavirus en el hermético régimen.
Debido a la pandemia Corea del Norte mantiene cerradas al tráfico de personas sus fronteras desde enero de 2020.
En el último tramo de ese año el país endureció aún más estas restricciones, por lo que sus importaciones desde China (de donde obtiene el 90 % de lo que compra del exterior) cayeron a mínimos y se agravaron los problemas de escasez alimentaria que afectan al país.
El comercio transfronterizo pareció repuntar en los pasados meses de marzo y abril gracias al establecimiento de centros logísticos fronterizos para desinfectar los bienes importados, según observadores del régimen.
Pionyang comunicó a comienzos de mes a la Organización Mundial de la Salud que ha testado a más de 30,000 personas en el país sin detectar ni una sola infección de COVID-19, según señaló el organismo internacional.