La reacción a la última propuesta presentada por las Grandes Ligas a los jugadores, la de disputar 76 partidos con un salario prorrateado del 50 por ciento garantizado y otro 25 por ciento opcional, si se completa todo el calendario, no ha tenido el mejor recibimiento entre los peloteros.
Aunque oficialmente el sindicato de jugadores no ha dado a conocer su respuesta y si van a presentar otra diferente, esta noche ya se daba como rechazada de manera extraoficial, de acuerdo a varias fuentes periodísticas.
La razón es que los jugadores tendrán de nuevo que acceder a sufrir más recortes en sus salarios si aceptan disputar un calendario con 76 partidos.
Los jugadores han mantenido que no reabrirán el acuerdo del 26 de marzo que cerraron con los dueños que exigía que se les pagara el ciento por ciento de sus salarios prorrateados para 2020.
En la última propuesta, los dueños ofrecieron un reconocimiento tácito de la probable realidad de que el mercado de agentes libres de este invierno será pésimo para los jugadores, por lo que ofrecieron una concesión al eliminar la compensación de selección de reclutamiento para cualquier equipo que firme un agente libre.
Los dueños nuevamente lanzaron una postemporada ampliada, un concepto que los jugadores acordaron en la propuesta de 82 partidos. La nueva propuesta tiene más de la mitad de los equipos, 16, es decir, ocho de cada liga, que califican para la postemporada.
Pero el ambiente de las conversaciones se ha deteriorado constantemente.
En su propuesta inicial, los dueños lanzaron un calendario de 82 partidos en el que los jugadores recibirían el 60 por ciento de sus salarios prorrateados. Los dueños citaron pérdidas de 4.000 millones de dólares (3.544 millones de euros) al no haber aficionados en los campos y afirmaron que no querían hacer frente ellos solos a esa carga económica.
Antes de hacer una contrapropuesta, los jugadores pidieron a los dueños datos económicos que respaldaran su estimación de pérdidas. Los dueños proporcionaron algunos, no todos, los registros que buscaban los jugadores, quienes respondieron con una propuesta de 114 partidos en la que se les pagaría el ciento por ciento de su salario prorrateado.
Los dueños rechazaron esa propuesta a fines de la semana pasada y dedicaron tiempo a estudiar los próximos pasos a seguir y la respuesta fue la propuesta que dieron a conocer este lunes y que ahora tendrá que ser respondida por los jugadores, si lo desean.
En términos de dinero garantizado, la nueva propuesta, al 50 por ciento, ofrece a los jugadores un 20 por ciento menos que la propuesta original de 82 partidos, que ofrecía a los jugadores el 60 por ciento, garantizado, de sus salarios prorrateados.
La propuesta de 76 partidos de los dueños ofrece una aportación de 1.430 millones de dólares (1.266 millones de euros) en salarios para los jugadores, incluyendo 989 millones que estarán garantizados y 443 millones ( 392 millones de euros) más que se distribuirán solo si se completan los playoffs.
Otra forma de ver eso es usando el Jugador X, quien firmó para ganar 10 millones de dólares (8,8 millones de euros) esta temporada.
Con 82 partidos, un jugador durante más de media temporada, su salario sería apenas superior a cinco millones de (4,4 millones de euros) dólares. Con la tasa original del 60 por ciento y el mismo calendario de competición el Jugador X ganaría tres millones de dólares garantizados (2,6 millones de euros).
Según el plan de 76 partidos, al Jugador X se le garantizaría solo 2,5 millones de dólares (2,2 millones de euros).
Con los playoffs, se agregaría el otro 25 por ciento de la propuesta del lunes de los dueños, que les permitiría llegar a ganar un salario de 3,7 millones de dólares (3,2 millones de euros).
De cualquier manera, la cantidad de dinero que recibirían los jugadores en la nueva propuesta no es muy diferente de lo que los dueños propusieron con 82 partidos o lo que será si terminan acortando la temporada a 48 o 50 partidos y los peloteros ganan el ciento por ciento de sus salarios prorrateados.
Con los jugadores que probablemente necesiten tres semanas completas de un segundo entrenamiento de primavera, la posibilidad de comenzar la temporada regular 2020 a principios de julio cada vez se aleja más.
los dueños tienen derecho a programar e implementar una temporada, según el acuerdo del 26 de marzo.
El acuerdo también le da al comisionado de las Grandes Ligas, Ron Manfred, el derecho de crear e imponer un cronograma, utilizando los mejores esfuerzos para disputar tantos partidos como sea posible.
Además de considerar los factores de la seguridad y la salud de los jugadores, las necesidades de reprogramación, las consideraciones competitivas, la disponibilidad del estadio y la viabilidad económica de varias alternativas, como establece el acuerdo que ambas partes cerraron el pasado marzo.