Marranzini señala que se está ante una oportunidad de dotar al país de una base fuerte para el desarrollo económico y social para los próximos años, abriendo las puertas a una nueva era de industrialización bajo el signo de la Cuarta Revolución Industrial. En ese aspecto, Circe Almánzar, vicepresidente ejecutiva de la AIRD y editora de la publicación, señala que “competir requiere que los participantes se encuentren en condiciones similares, que definan sus ventajas comparativas, que sus problemas estructurales se encuentren resueltos, que puedan sacar ventajas de los mercados extranjeros, tanto como las industrias extranjeras sacan ventajas del mercado nacional”.
Señala que, a la firma del DR-Cafta, el sector productivo dominicano tenía retrasos importantes para competir con sus pares de la región y que nuevos acuerdos pusieron más en evidencia las debilidades de la estructura productiva dominicana.
La publicación
La publicación se centra en este semestre en las iniciativas industriales ante la apertura comercial, teniendo como título de su dossier “La dura ruta hacia la competitividad”.