La obra, de la autoría del historiador Frank Moya Pons, tiene como punto de partida el año 1853, época cuando en la República Dominicana no existía una red vial que conectara todo el territorio, sino senderos pedregosos y enlodados.
Para la ocasión, el Grupo Estrella, representado por Manuel Estrella, ofreció una ceremonia a la que asistieron empresarios, directores de medios de comunicación y personalidades de la vida nacional.
En la mesa principal estuvo acompañado por su esposa, Loly Tavares de Estrella, presidenta de la Fundación Estrella; Moya Pons, escritor de libro; así como los ingenieros Pedro Delgado Malagón, Manuel Genao, Giuseppe Rainier Aristi y Manuel Estrella Tavares.
El presidente del consejo de administración del Grupo Estrella, Manuel Estrella, expresó que no es dado a celebrar, pero que junto al ingeniero Pedro Delgado Malagón pasó revista y entendió que la compañía es una de las más viejas en el país y alcanzar 35 años en la industria de la construcción es motivo de celebración.
Recordó que la empresa nació en el año 1983, pero se trata de un proyecto cíclico, pues en un momento hay mucho trabajo y en otro no hay nada, y precisamente esa situación lo llevó a expandirse y buscar otras ofertas.
“Y no es que no hemos pasado por crisis. Hemos quebrado dos veces. En el 1995, porque había una crisis en el país y el Fondo Monetario restringió el gasto y el primero fue el sector construcción. Nos quedamos sin trabajos y la oficina fue trasladada a una de las habitaciones de la casa”, narró.
El empresario agregó que en la crisis del año 1990 volvió a quebrar la empresa y de nuevo la construcción quedó en cero, porque la restricción del gasto afectó el sector. En ese entonces la oficina fue a parar a la caseta de una construcción frustrada.
Aseguró que esas quiebras le dieron dos grandes enseñanzas y a ellas atribuye su éxito en el sector construcción, porque aprendió que era imposible mantener una constructora solamente ofreciendo servicios, lo cual lo llevó a idear un plan con dos líneas de acción; una de diversificación y la otra de internacionalización.
Destacó que en base a esa estrategia, en el año 1992 empezó a comprar equipos pesados para vender un producto que se llama hora de alquiler y adquirió un primer camión.
“A partir de ahí comencé a comprar equipos y recuerdo que se acabó el acueducto Valdesia Santo Domingo y se inició el Cibao Central y fue donde Pedro Esteva, que iniciaba en implementos y maquinarias y me fió tres excavadoras nuevas y las metí todas en el acueducto Cibao Central”, refirió.
Estrella explicó que luego vino el proyecto carretera Duarte y continuó comprando equipos y hoy por hoy tiene más de mil unidades de equipos pesados.
Mientras que en el año 1993 inició la fábrica de estructuras metálicas Acero Estrella, una década negativa para el sector construcción, pero continuó trabajando.
“Tuvimos que ser muy innovadores y trajimos una serie de productor nuevos, incluyendo los edificios multiplitos con la tecnología metaltec y crecimos mucho”, agregó el empresario.
Precisó que luego se incluyeron los puentes con estructura de acero en la ciudad y en el año 2002 la empresa se diversificó para hacer los aceros en láminas y hoy son suplidores de zinc, aluzinc, tejas metálicas, correas y otras piezas de acero plano, lo que le ha permitido un crecimiento vertical en la industria del acero.
“En el año 2013 entramos al cemento, lo cual llamo una osadía”, manifestó.
Informó que también invirtieron en el Aeropuerto Internacional del Cibao, un proyecto muy exitoso y además adquirieron multimedios El Caribe y en el 2008 decidieron invertir en un proyecto para un hospital, donde han tenido éxitos.
“Mañana va el presidente (Danilo Medina) a dar el primer picazo para el inicio de los trabajos para la construcción de un hotel y una torre profesional”, adelantó.
Estrella citó como parte del éxito generado la diversificación de su empresa, la adquisición de la ferretería Ochoa y la compra de acciones en AERS.
El empresario dijo que el Grupo Estrella se internacionalizó y actualmente realiza obras en Haití, Panamá, Costa Rica, Paraguay y Jamaica.
“Actualmente estamos licitando en Brasil, Perú Colombia y Guyana. Acabamos de entrar al mercado norteamericano con una licitación que ganamos de un puerto en el Estado de Alabama”, informó.
Explicó que todas esas acciones son frutos del esfuerzo para evitar la volatilidad que afecta a la industria de la construcción.
Destacó que en sus 35 años de trabajo han generado unos 15,000 empleos directos, han construido más de 20 millones de pies cuadrados de techo, más de 1,200 kilómetros de vías y venden al año alrededor de 15 millones de fundas de cemento.
De la misma forma cada año su empresa vende cerca de 350,000 metros cúbicos de concreto.
Estrella manifestó que la celebración de los 35 años de operaciones del Grupo es un acto de acción de gracia a Dios, por lo obtenido y lo realizado.
“Es dar gracias a Dios por el juicio o tal vez, por el coraje. Es dar gracias a los clientes que siempre nos han apoyado. Es dar gracias a los compañeros de trabajo por su solidaridad, entrega y lealtad. Es dar gracia a los bancos comerciales, porque este crecimiento ha sido financiado por ellos y le doy muchas gracias a mi familia, que siempre me ha apoyado en las muy buenas y en las muy malas”, manifestó Estrella.