El Ministerio de Hacienda y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) firmaron un contrato de préstamo por US$90 millones para la segunda fase del proyecto de desarrollo turístico y urbano de la Ciudad Colonial de Santo Domingo.
El titular del despacho de las finanzas públicas, Donald Guerrero, dijo que la ejecución del plan estará en manos del Ministerio de Turismo, con el apoyo técnico de la Alcaldía del Distrito Nacional y del Ministerio de Cultura.
Al respecto, el alcalde David Collado dijo que con la firma del segundo tramo de ese acuerdo “estamos dando una señal clara de madurez política, una señal de que dejamos a un lado las diferencias políticas”, y que las partes que participan en el programa de mejoras de la Zona Colonial capitalina se pusieron “de acuerdo por el bien de la ciudad”.
La ejecución del primer tramo del acuerdo con el BID, por un monto de US$30 millones, enfrentó trabas por las diferencias sobre qué organismos debían ejecutar los proyectos.
Con la segunda fase del préstamo, que aún debe ser revisada y aprobada por el Congreso Nacional, el Gobierno dominicano espera mejorar las condiciones turísticas y de habitabilidad de la Ciudad Colonial de Santo Domingo, a través de la recuperación de los espacios públicos y monumentos históricos, como el Convento de San Francisco, el museo del Alcázar de Colón, el Museo de las Casas Reales, la museografía de la Fortaleza de Santo Domingo y el Museo de la Catedral, entre otros. A ese componente se destinarán unos US$49 millones, según informó el ministro de Hacienda durante la firma del convenio.
En los planes también está el mejoramiento de la habitabilidad para los residentes, el desarrollo de la economía local y el fortalecimiento de la gestión turística cultural y urbana. Para ello se dispondrán US$41 millones y entre los programas se incluyen las mejoras de luminarias y también estacionamientos.
Con ello, Guerrero dijo que se espera un aumento de la actividad económica.
Por su parte, el representante del BID en República Dominicana, Miguel Coronado, destacó la importancia del proyecto y dijo que la primera fase permitió que el turismo en la zona colonial creciera en 67 %, al situarse el número de visitantes en 685,000, mientras que la tasa de ocupación hotelera pasó de 55 % en 2010 hasta un 74 % el año pasado.