“Se acabó el relajo en este cementerio”. Con esta frase dejó iniciado ayer el alcalde del Distrito Nacional, David Collado, los trabajos para elevar una verja perimetral en todo el Cementerio Nacional Máximo Gómez para mejorar la seguridad.
Al muro se le agregarán 1.8 metros y será llevado a una altura de 3.90 metros. Los trabajos conllevan una inversión de RD$9,500,255, y estarán a cargo del Departamento de Infraestructura del ADN, con la auditoría del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.
Asimismo, contará con un muro de dos mil 625 metros cuadrados en bloques de seis pulgadas con bastones a 60 centímetros de separación, mil 640 metros lineales de viga de amarre de coronación, 565 metros lineales de columna de amarre. También, será complementado con seis mil 400 metros de pañete en muro, vigas y columnas de 12 mil 870 metros cuadrados de acabado de muro nuevos y existentes con pintura acrílica superior.
Recordó que hicieron una alianza con la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y la Policía Nacional, para mantener la vigilancia permanentemente y evitar que se llevaran a cabo en el camposanto negocios o acciones ilícitas.
“Hablábamos de que los cementerios se habían convertido en muchos escondites de delincuentes, que entraban a los cementerios a refugiarse luego de cometer cualquier fechoría.
Hablábamos de que ya los seres humanos no podían venir a tener ese momento sagrado con sus seres queridos el día de los fieles difuntos o el día de las madres para reflexionar, para recordar esos momentos de alegría”, dijo Collado.