La Cámara de Diputados aprobó un nuevo préstamo por 300 millones de dólares, para el financiamiento de un programa de apoyo a la emergencia generada por la pandemia del COVID-19.
El contrato, suscrito el 16 de marzo del 2021 entre el país y la Corporación Andina de Fomento (CAF), fue conocido rápidamente por la Cámara de Diputados, a punto tal que hubo quejas de las bancadas de oposición por cómo fue aprobado.
Debido a que la Cámara de Diputados estaba sesionando en el salón de la Asamblea Nacional, la votación fue manual y el presidente de este órgano, Alfredo Pacheco, realizó un curioso método para revalidar la aprobación.
La situación inició cuando el vocero del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en la Cámara Baja, Gustavo Sánchez, solicitó enviar a comisión nuevamente el proyecto para ser conocido y explicada la necesidad de un nuevo préstamo, pero esto fue rechazado.
“Hicimos la propuesta de que el proyecto vuelva a comisión, ellos sometieron a votación eso y lo rechazaron y sobre eso, con 115 diputados presentes, 35 diputados del PLD salieron y a partir de ahí cualquier aprobación posterior es ilegal”, dijo Sánchez.
Y es que segundo después fue sometido el informe favorable de la comisión a votación y Pacheco lo aprobó casi de inmediato, a pesar de que supuestamente no había quorum suficiente.
Momentos después, las bancadas de oposición se levantaron de sus asientos para pedir un reconteo y Pacheco dijo que todos los que estén a favor debían pararse y al ver a todos de pie, el presidente de la Cámara dio por aprobado el nuevo préstamo.
Gustavo Sánchez calificó la acción como una “dictadura” que ha querido implementar el Partido Revolucionario Moderno “para llevar a cabo aprobaciones completamente que no responden a la Constitución ni al reglamento”.