Nueva York
La rapera Cardi B se hizo con tres de los diez premios a los que aspiraba como favorita en una gala de los MTV Video Music Awards (VMA) muy repartida, aunque no para el dúo The Carters, formado por Beyoncé y Jay-Z, que se fue de vacío en las principales categorías.
La neoyorquina de origen dominicano exhibió humor en su primera aparición pública tras ser madre ya que, al inaugurar el espectáculo, llevaba en brazos un bulto envuelto en una manta que parecía ser un bebé y resultó ser su primer galardón.
Belcalis Almanzar -su nombre real- comenzó su gran noche en la alfombra roja, cuando se cerró el voto popular de la «Canción del verano» y se lo llevó su «I like it» junto a Bad Bunny y J Balvin. Más tarde se alzó con «Mejor nuevo artista» y «Mejor colaboración», por «Dinero», que interpreta con Jennifer López y DJ Khaled.
Otro artista que repitió distinción en las principales categorías de los VMA, que ya no distinguen de sexo, fue la estadounidense de origen cubano Camila Cabello, «Artista del año» y ganadora al mejor video por «Havana», en colaboración con el rapero Young Thug.
Sorprendió al llevarse la «Canción del año» el rapero Post Malone por su «rockstar» con 21 Savage, mientras que Ariana Grande triunfó en mejor video pop («No tears left to cry»), Nicki Minaj en hip-hop («Chun-Li»), y J Balvin y Willy William en latino («Mi gente»).
The Carters, que partían como los segundos favoritos con ocho nominaciones, se tuvieron que conformar con dos estatuillas en las categorías profesionales de «Mejor cinematografía» y «Mejor dirección de arte» por «APESH¿T», grabado en el Museo del Louvre.
Los MTV VMA volvieron este año al icónico Radio City Music Hall de Nueva York, que los vio nacer en 1984, y frente al cual centenares de «fans» se emocionaron con la actuación coreografiada de los Backstreet Boys en un escenario al aire libre situado sobre los icónicos letreros de neón del teatro.
Y es que no todo son videoclips en esta gala anual de la MTV, sino sobre todo espectáculo, como el que dio a distancia la rapera Nicki Minaj dentro de la estación del World Trade Center (WTC), conocida como Oculus y diseñada por el arquitecto español Santiago Calatrava.
No obstante, fue el «show» de una enérgica Jennifer López, que acaba de cumplir 49 años, el que mantuvo entregado durante más de diez minutos a un público con un popurrí de temas que iban desde sus clásicos «Waiting for tonight» o «My love don’t cost a thing» hasta las actuales «El anillo» o «Dinero».
López no olvidó cantar que aún es «Jenny from the block» antes de convertirse en la primera artista latina que recibe el galardón honorífico Video Vanguard por una carrera en la que ha escrito sus «propias reglas», dijo, y es «más fuerte que nunca» gracias a sus dos hijos.
Entre otros, subieron al escenario Maluma, Ariana Grande, Travis Scott y finalmente Post Malone, que tras interpretar su «hit» de rap se colgó una guitarra y se unió al grupo de rock Aerosmith en una interpretación conjunta de la mítica «Dream on» para cerrar la gala.
El mensaje político de la velada corrió a cargo del rapero Logic, que lució un «Fuck the wall» («que le jodan al muro») en su camiseta, en alusión a la política migratoria de la Administración Trump, y se rodeó de jóvenes en cuyas prendas se leía «We are all human beings» («Todos somos seres humanos»).
Y no faltó a la cita la diva del pop Madonna, que protagonizó un emotivo momento al rendir tributo a la recientemente fallecida Aretha Franklin, cuya canción «You make me feel like a natural woman», recordó, le brindó su primera oportunidad al adentrarse en el mundo de la música.
«Ella me trajo adonde estoy hoy e influyó en mucha gente que está hoy aquí. Gracias, Aretha, por empoderarnos a todos. RESPETO. Larga vida a la reina», zanjó.EFE