El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunciará este jueves medidas para limitar las armas de fuego, en particular para prevenir la propagación de las «armas fantasma», imposibles de rastrear.
El mandatario ha recibido presiones por parte de sus aliados demócratas para que actúe tras los recientes tiroteos de Colorado, Georgia y California.
Biden anunciará seis medidas para «hacer frente a la epidemia sanitaria vinculada a la violencia de las armas de fuego», adelantó un funcionario de la Casa Blanca que pidió el anonimato.
En particular, apuntará contra las llamadas «armas fantasma», las armas caseras que no se pueden rastrear debido a que no tienen números de serie, indicaron.
Buscará, además, un mayor apoyo a las agencias involucradas en la lucha contra la violencia y solicitará el primer informe global sobre tráfico de armas de fuego en Estados Unidos desde 2000.
Sin embargo, no se espera que anuncie medidas importantes para endurecer las leyes que limitan el acceso a las armas, como una mayor verificación de antecedentes o poner fin a la venta de rifles de asalto, a menudo utilizados en los tiroteos masivos.
Primeros pasos
El citado funcionario subrayó que las disposiciones que anunciará Biden junto al secretario de Justicia, Merrick Garland, son solo los «primeros» pasos.
Además de las medidas relativamente modestas sobre este tema políticamente hipersensible, Biden anunciará la nominación de David Chipman, un defensor del control de armas, para encabezar la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), una agencia central en la lucha contra la violencia armada.