Una misa en honor a las víctimas de la explosión ocurrida en San Cristóbal fue realizada este miércoles a la que asistió el presidente Luis Abinader junto a otros funcionarios de Gobierno.
El mandatario estuvo acompañado por la primera dama, Raquel Arbaje, la vicepresidenta Raquel Peña, así como parte de su gabinete presidencial.
La eucaristía, realizada en la iglesia Nuestra Señora de la Consolación, inició pasada las 10:00 de la mañana y fue oficiada por el sacerdote Cruz María Echeverría.
En la homilía, el religioso resaltó las rápida respuesta de las autoridades nacionales, provinciales y municipales.
También el trabajo realizado por el personal de socorro y de los médicos, enfermeras y otros servidores del sector salud que estuvieron muy preocupadas por atender a las víctimas.
Destacó la unidad y armonía de las autoridades y la población para que tras el acontecimiento el sufrimiento fuera el menor posible y más rápidamente se responda a la emergencia.
En las peticiones, elevó plegarias por el eterno descanso de las personas que perdieron la vida por el siniestro y la salud de aquellos que se recuperan de las lesiones sufridas.
La agenda presidencial fue cambiada ya que se tenía previsto que el mandatario daría un discurso con motivo al 160 aniversario de la Restauración, desde la provincia Pedernales.
En tanto, Abinader decidió continuar con la dirección de los trabajos y asistencias a los afectados desde el lugar de los hechos.
Luego de la eucaristía, el presidente Abinader encabezará una reunión a las 11:00 de la mañana en la Gobernación Provincial de San Cristóbal para direccionar los trabajos de búsqueda y rescate de los desaparecidos.