El presidente Luis Abinader promulgó hoy la modificación a la Ley de Proindustria, que procura incrementar la competitividad de la industria nacional, fortalecer las cadenas de valor y estimular las exportaciones nacionales a través de una serie de medidas orientadas a la renovación y modernización del sector manufacturero nacional.
Modifica los artículos 4, 9 y 17 de la Ley 542-14 sobre Innovación y Competitividad Industrial y a partir de ahora se extiende por quince años los incentivos fiscales.
Además corrige distorsiones fiscales, hará más fácil producir, estimulará las exportaciones de la industria local, permitirá la compensación del pago del impuesto a la transferencia de bienes y servicios (ITBIS) y facilitará el encadenamiento productivo entre el sector industrial y las zonas francas, lo que deberá de reflejar mayor ventas de las industrias locales a las zonas francas instaladas en el país que a la fecha importan más de US$3,600 millones anuales en insumos para su producción.
Una comunicación de prensa de la Presidencia de la República dice que el presidente Abinader firmó el documento y entregó ejemplares a los empresarios del sector industrial de la República Dominicana.
En el acto, realizado la mañana de este lunes en el Salón Verde del Palacio Nacional, acompañaron al mandatario, el ministro Administrativo de la Presidencia, José Ignacio Paliza; el ministro de Trabajo, Luis Miguel de Camps; Ulises Rodríguez, director de Proindustria; Noelia Rivera, subconsultora Jurídica y Carlos Guillermo Flaquer, viceministro de Industria y Comercio.
Estaban presentes los empresarios Roberto Herrera, del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP); Bredig Dilsa, presidenta de la Asociación de Industrias de Haina y la región sur; Juan Ventura, presidente de la Asociación de Industrias de la región norte y Jonathan Bournigal, jefe de gabinete de Industria y Comercio.
Según la Presidencia de la República, Celso Juan Marranzini, presidente de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD), indicó que esta ley abre puertas a nuevas inversiones, a la reinversión de utilidades y fortalece el camino hacia la transformación de la industria dominicana.
Marranizini resaltó que se trata de un paso fundamental para reactivar las empresas que conforman el sector manufacturero, incluyendo las pymes, en la generación de más empleos formales, especialmente en estos momentos tan delicados que vive la economía mundial a causa de la Covid-19.
Esta ley sobre Competitividad e Innovación Industrial permitirá a los industriales reinvertir sus utilidades y descontar las mismas del pago del impuesto sobre la renta, o sea que permite descontar lo invertido en maquinarias nuevas en el ejercicio fiscal del año anterior hasta un 50% de la renta neta imponible.
También facilita a las empresas contratar consultorías internacionales en materia de innovación sin retención de impuestos del ISR al consultor internacional e importar materias primas, maquinarias y bienes de capital pagando solo el 50% del ITBIS ante la Dirección General de Aduanas.
Esta ley procura motivar la producción en todo el aparato industrial dominicano, destacándose los sectores de alimentos y bebidas, construcción, cosméticos, plásticos, farmacéuticos, entre otros, que podrán beneficiarse de estos incentivos a partir de la fecha.