El presidente de República Dominicana, Luis Abinader, defendió este jueves ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que los avances en justicia social en el mundo se logren “sin enfrentamiento de clases ni discursos que enfrenten a ricos y pobres».
“Esta visión la estamos implementando en la República Dominicana (…) evitando la polarización y priorizando políticas que integren a todos los sectores sociales sin antagonismos y sin las populistas ideas de la lucha de clases”, señaló al inaugurar en Ginebra el foro de la Coalición Mundial para la Justicia Social, organizado dentro de la conferencia anual de la OIT.
Abinader afirmó que esa justicia social debe traducirse en “salarios que permitan vivir con dignidad” y en condiciones laborales “que respetan la salud, la seguridad y el equilibrio entre vida y trabajo».
“Sabemos que millones de personas hoy trabajan sin derechos, sin contratos ni salarios justos, sin garantías mínimas en nuestra región y en mi país”, reconoció el presidente dominicano, quien subrayó que el empleo informal sigue siendo la realidad de “una proporción demasiado grande de la población trabajadora».
En la República Dominicana, recordó, se ha alcanzado un porcentaje récord del 46,6 % en formalidad laboral, mientras que el salario mínimo promedio del sector privado no sectorizado ha crecido en un 60,8 % en los últimos cuatro años y medio en términos nominales y un 24,8 % en términos reales.
Abinader también presentó otras cifras como avances de su país, como el hecho de que se haya logrado un 97 % en cobertura de seguro familiar y de salud para la población dominicana, o una tasa promedio de desocupación abierta del 5,2 % entre 2022 y 2025.
“Hoy casi la mitad de nuestra población, un 46,5 %, pertenece a la clase media, y hemos reducido la pobreza monetaria del 30,7 % al salir de la pandemia al 18,05 %, la menor en nuestra historia”, subrayó el también economista y empresario dominicano.
“El compromiso se traduce en mi país en acciones que están promoviendo un clima de confianza, donde el diálogo sustituye al enfrentamiento y donde los trabajadores y empleadores avanzan juntos por un futuro compartido”, resumió Abinader.