Si hay algo que nos hace humanos, son nuestras mentes, pensamientos y emociones.
Sin embargo, está surgiendo una nueva y controvertida teoría que sostiene que las bacterias intestinales alteran de forma invisible nuestro cerebro.
La ciencia está buscando entender cómo los trillones de microbios que viven en nuestro interior y exterior nuestro microbioma afectan nuestra salud física.
Y ahora incluso condiciones como la depresión, el autismo y las enfermedades neurodegenerativas están siendo vinculadas con estas pequeñas criaturas.
Hemos sabido durante siglos que la manera en que nos sentimos afecta nuestro intestino solo piensa en lo que sucede antes de un examen o una entrevista de trabajo pero ahora se está viendo esto como un camino de doble sentido.
Grupos de investigadores creen que están en la cúspide de una revolución que utiliza «microbios de estado de ánimo» o «psicobióticos» para mejorar la salud mental.
La investigación que dio pie al concepto se realizó en la Universidad de Kyushu, en Japón.
Los científicos demostraron que los ratones «libres de gérmenes»aquellos que nunca entraron en contacto con microbios generaban el doble de hormona del estrés cuando estaban angustiados que los ratones normales.
Los animales eran idénticos con excepción de sus microbios. Fue un fuerte indicio de que la diferencia fue el resultado de sus microorganismos.
«Todos los neurocientíficos que estudiamos los microbios nos remontamos a aquel primer artículo», dice la doctora Jane Foster, neuropsiquiatra de la Universidad McMaster en Canadá.
«Realmente fue muy poderoso para aquellos de nosotros que estábamos estudiando la depresión y la ansiedad».
Fue el primer indicio de medicina microbiana en la salud mental.
Cómo las bacterias podrían estar alterando tu mente
El cerebro es el objeto más complejo del universo que conocemos, entonces, ¿cómo podría estar reaccionando a las bacterias en el intestino?
Ahora hay mucha investigación que vincula a ratones libres de gérmenes con cambios en el comportamiento e incluso en la estructura del cerebro.
Pero la crianza completamente estéril de estas criaturas no se parece en nada al mundo real. Los humanos estamos constantemente en contacto con microbios en nuestro entorno, ninguno de nosotros está libre de gérmenes.
En el Hospital de la Universidad de Cork, en Irlanda, el profesor Ted Dinan intenta descubrir qué sucede con el microbioma de sus pacientes deprimidos.
Por lo general, un microbioma saludable es un microbioma diverso, que contiene una amplia variedad de especies diferentes que viven por todo nuestro cuerpo.
El profesor Dinan explica: «Si comparas a alguien que está clínicamente deprimido con alguien que es saludable, hay menos diversidad de microbiota.
«No estoy sugiriendo que sea la única causa de la depresión, pero sí creo que para muchas personas sí juega un papel en la génesis de la depresión».
También argumenta que algunos estilos de vida que debilitan nuestras bacterias intestinales, como una dieta baja en fibra, pueden volvernos más vulnerables.
FUENTE: BBC MUNDO
Por: James Gallagher