Sergio Pascual Vargas Parra, mejor conocido como Sergio Vargas, aseguró que las propiedades incautadas que dice en el expediente presentado por el Ministerio Público contra los imputados de la Operación Medusa, que ocupaba, fue parte de un intercambio por sus servicios de artista.
El cantante de merengue y bolero expresó que trató un acuerdo con la gestión pasada de la entidad de dar conciertos en los diferentes recintos penitenciarios del país.
«Se trata de dar conciertos en las cárceles, especialmente en las cárceles de menores. Cinco conciertos antes de la pandemia, uno en esta administración», dijo Vargas.
Agredo: «El apartamento es como parte del intercambio. Tendría la opción de comprarlo una vez depurado», manifestó Sergio Vargas.
Vargas asegura que paga todos los servicios y que firmó un documento para tener la primera opción a compra una vez sea depurada la propiedad o sea el apartamento donde pernocto cuando estoy en la capital.
Con respecto a la segunda propiedad expresó que había sido devuelto con la llegada de la pandemia del coronavirus.
«El local se devolvió cuando llegó la pandemia. Íbamos a hacer un laboratorio/estudio de grabación para esos jóvenes cuando fueran saliendo de la cárcel, para los que tuvieran talento, darles la oportunidad, pero por la pandemia se fue a pique. El local se lo devolví a la procuraduría».