Una exdirectora del Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani) y una exempleada del Banco de Reservas se encuentran bajo investigación del Ministerio Público por su vinculación al caso de corrupción denominado Operación Coral.
La información fue revelada este martes por la procuradora adjunta Yeni Berenice Reynoso, quien dijo que el entramado replicó en Conani lo mismo que hacían en otras instituciones con nómina y adquisiciones de bienes. No reveló los nombres de las dos funcionarias que están siendo investigadas.
Dijo que Rafael Núñez de Aza fungió como director financiero de Conani aunque no aparecía registrado como tal.
En cuanto a la empleada bancaria suspendida y bajo investigación, expresó que la misma trabajaba en la sucursal de la avenida Venezuela en Santo Domingo Este. Supuestamente a cambio de prebendas, esta recibía y realizaba transacciones para los miembros del entramado del caso Coral.
Además, calculó que hasta ahora han determinado que la red de corrupción, sindicada al mayor general Adán Cáceres Silvestre, tuvo operaciones por más de 700 millones de pesos.
“Cuando preliminarmete el monto era inferior y son montos que en el día a día se van actualizando en función de que le hemos ido descubriendo nuevas adquisiciones de bienes”, precisó.
La procuradora adjunta explicó que esos recursos salían básicamente del Cuerpo Especializado de Seguridad Presidencial (Cusep), el Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (Cestur) y del Conani
“De Conani es horrible el impacto que tiene, decimos de Conani porque también hemos descubierto en el transcurso de la investigación que Nuñez de Aza también fue el director financiero del Conani, a pesar de que no aparecía en los registros públicos y esto, robarse y distraer dinero del Estado, que debe ir a la alimentación y cuidado de niños en situaciones precarias como los que van a Conani, es un crimen atroz”, expresó Reynoso.
Yeni Berenice Reynoso habló durante la audiencia en donde le ratificaron la prisión preventiva a Tanner Flete Guzmán, hijo de la pastora Rossy Guzmán, quienes son señalados como parte de la red de corrupción.