Willy Antonio Javier Monegro estuvo 15 días junto a sus secuaces ubicando y planificando el ataque con ácido del diablo en contra de su expareja Yocairi Amarante Rodríguez, hasta concretar su crimen el pasado fin de semana.
Su actitud machista no le permitió aceptar que desde hace tres meses la joven lo dejara. De hecho, cuando fue detenido, dijo a las autoridades que se sentía muy mal porque esta lo dejó y en el barrio no paraban los “comentarios” negativos hacia él y de que ella había comenzado una relación con otra persona.
En esa situación buscó a su amigo Pedro Alexander Sosa Méndez, a quien le ofreció 25 mil pesos para que atacara con la sustancia ácido del diablo a su expareja.
A partir de ese día, Willy Javier Monegro comenzó a mostrarle fotos de Yacairi a Pedro Alexander para que este pudiera reconocerla.
Willy Javier Monegro le adelantó 3,500 pesos a su amigo, quien buscó a un tercero, Joan José Feliz (Pinocho), quien se montó en la parte trasera del motor y lanzó el ácido a la joven.
El crimen se materializó el pasado viernes en momentos en que la joven se transportaba en un carro público desde su trabajo a su casa.
El chofer del carro público también resultó con lesiones en los brazos y otras partes del cuerpo .
A estos imputados le conocerán medidas de coerción este viernes. La Fiscalía del Distrito Nacional está solicitando prisión preventiva.
El informe de la Policía indica que Pedro Alexander fue apresado mediante orden de arresto y allanamiento, en horas de la madrugada del miércoles 30 de septiembre, en el sector Los Guandules, y al ser entrevistado al momento de su captura, manifestó que quien echó la sustancia a la víctima fue su amigo Joan José Feliz.
La Policía Nacional informó, además, que durante los allanamientos realizados en el sector Los Guandules, se ocupó la motocicleta utilizada, el casco protector, así como también la ropa que tenían puesta los detenidos la tarde del viernes 25 de este mes, cuando se materializó la agresión.
La joven, de 19 años, está en situación crítica en la unidad de quemados del hospital Ney Arias Lora.