En mayo los ingresos fiscales se situaron en 34,801 millones de pesos, con lo que la caída se profundizó justo en el mes en que el gobierno decidió iniciar el proceso de desescalada. Los datos del Ministerio de Hacienda indican que en ese lapso entraron 21,046 millones de pesos menos que un año antes, lo que supuso una caída interanual de 37.7 %.
En medio de la declaratoria de emergencia para evitar la propagación del COVID-19, el gobierno dominicano debió ordenar el cese de las actividades económicas no esenciales y el cierre de las fronteras desde el pasado 19 de marzo. Dos meses más tarde, el 19 de mayo, permitió que la economía comenzará a reactivarse en un programa de cuatro fases.
Mucho de lo que dejó de ingresar el fisco nacional está relacionado con el consumo de los hogares. La recaudación del ITBIS, una de las mayores fuentes de ingresos para el Estado dominicano, pasó de 88,247 millones de pesos entre enero y mayo del año pasado hasta 73,268 millones de pesos en igual lapso de 2020, lo que representó una bajada de 17 % en un año.
De acuerdo a los datos sobre el sistema de pagos que maneja el Banco Central de la República Dominicana, la demanda no ha estado en su mejor momento. En abril -los datos de mayo todavía no están disponibles- las operaciones a través de puntos de venta con tarjetas de débito y crédito mostraban todavía una caída de un 28 % y 53% respectivamente, durante un mes en el que se registró una fuerte caída económica de casi 30 %.
En mayo lo recaudado por ITBIS, que es el indicador más representativo del consumo de los hogares dominicanos, cayó 33.9 %, mientras en abril el retroceso había sido de 45.8 %.
El gobernador del Banco Central de República Dominicana se ha mostrado confiado en que abril, cuando la economía dominicana registró un retroceso de casi 30 %, había sido el peor mes y que en adelante se registraría una gradual recuperación. Las autoridades económicas estiman que el PIB cerrará el año en crecimiento cero para luego volver en 2021 a su nivel potencial de 5 % de dinamismo.
El Congreso aprobó recientemente una reforma al presupuesto vigente para este año, tras una solicitud del Ejecutivo. La inesperada caída de los ingresos fiscales por el COVID-19 ha causado desequilibrio en las cuentas fiscales.