NEW YORK.– Los Mets de Nueva York ya tienen al frente del equipo como piloto al carismático expelotero puertorriqueño Carlos Beltrán y con el objetivo muy claro de que es el profesional ideal para que los vuelva a poner en el camino ganador y de los playoffs.
Beltrán, que fue uno de los jugadores más talentosos en la historia del club, es consciente de la responsabilidad que asume y que su llegada al equipo es de una gran transcendencia para el futuro de la franquicia.
Los Mets están necesitados de triunfos y para cambiar esa inercia decidieron contratar a un dirigente con nula experiencia en el banquillo, algo que muchos consideran una maniobra arriesgada para los Mets.
Pero el gerente general de los Mets, Brodie Van Wagenen, quien tampoco antes había ocupado un puesto de gerencia en el béisbol hasta que los Mets lo contrataron mientras trabajaba para la agencia de entretenimiento y deporte Creative Artists Agency después de la campaña del 2018, consideró que es el “ideal”.
Van Wagenen durante la presentación de Beltrán, que tuvo lugar el lunes, fue categórico al insistir que el equipo había fichado a un gran profesional que cuenta con todos los elementos para triunfar.
“Fueron las fortalezas de Carlos (Beltrán) las que al final lo llevaron a ser contratado”, admitió Van Wagenen. “Sabemos la calidad que hay dentro de la plantilla y ahora tenemos al profesional que podrá desarrollarlas al máximo”.
Dentro del béisbol profesional, nadie cuestiona el talento y los conocimientos que Beltrán tiene del deporte de la pelota, su posición dentro del mismos, sus dos décadas como jugador, el hecho de que ha venido preparándose para el puesto como asistente en la gerencia de los Yanquis de Nueva York.
Ahora tendrá que demostrar en el día a día cómo podrá darle al equipo una nueva filosofía y personalidad ganadora que fue lo que al final, a pesar de tener también grandes conocimientos e impresionar a los directivos durante la fase de entrevistas, no pudo conseguir su predecesor en el cargo, Mickey Callaway.
La ventaja para Beltrán es que la nueva corriente que se da en las Grandes Ligas tiene como política en contratar a pilotos que no cuentan con experiencia o muy poca.
Los ejemplos son precisamente otros compatriotas de Beltrán como Alex Cora, que pasó del puesto de entrenador de la banca de los Astros de Houston a piloto de los Medias Rojas de Boston a los que guió a ser campeones de la Serie Mundial en su primer año en el cargo.
Dave Martínez como mano derecha de Joe Maddon en los Rays de Tampa Bay, esta temporada, la segunda con los Nacionales de Washington, los coronó también campeones de la Serie Mundial.
Aaron Boone pasó de cronista de televisión a la cueva de los Yanquis y ahora es el primer timonel de los Bombarderos del Bronx en ganar 100 juegos o más en sus primeras dos temporadas. David Ross ha pasado de analista de televisión a dirigir a los Cachorros de Chicago.
Todos están convencidos dentro de los Mets que Beltrán pondrá de nuevo a los Mets o en la cima del béisbol por primera vez desde 1986, un objetivo que estando dentro de la División Este en la Nacional y luego teniendo enfrente, en interligas, en la Americana, a los Yanquis no será una misión fácil.
La competencia con los Yanquis es real, aun cuando juegan en ligas diferentes y solamente se ven las caras en acción de Interligas.
Pero más real es la competencia con los Nacionales (ahora campeones de la Serie Mundial), los Bravos de Atlanta (bicampeones del Este del Viejo Circuito) y los Filis de Filadelfia (quienes deberán mejorar bajo el mando de su nuevo piloto Joe Girardi), a quien los Mets no consideraron.
Beltrán tiene a su favor que sabe como superar la presión de estar en Nueva York, lo hizo como jugador, y ahora está preparado para enfrentarse con los aspectos diarios de piloto, en dos idiomas, cuando le toque enfrentarse también a los retos del día a día con los medios de comunicación.
El gran objetivo de Beltrán no es otro que darle a los Mets un título de la Serie Mundial, algo que en la historia del equipo solo pudieron conseguir Gil Hodges y Davey Johnson. Otros tres manejadores llevaron al equipo a disputar la Serie Mundial como fueron Yogi Berra, Bobby Valentine y Terry Collins.
“No veo la hora de volver a escribir nuestra historia con los Mets de Nueva York”, destacó Beltrán en su presentación. “Estoy preparado para el gran reto”.
El dominicano Omar Minaya, uno de los primeros latinoamericanos que ocuparon puestos de responsabilidad en la gerencia de las Grandes Ligas y que contrató a Beltrán en el 2005 como agente libre para los Mets, ahora como asistente especial al gerente general de los metropolitanos está convencido también de su éxito.