PARÍS.- Desde crear una encuesta online para conocer los estragos que causó el huracán María en Puerto Rico hasta recibir las respuestas a un examen de matemáticas en el teléfono móvil en un colegio de Costa Rica, los maestros latinoamericanos mostraron hoy en París cómo han integrado las nuevas tecnologías en sus aulas.
Decenas de educadores provenientes de varios países latinoamericanos y de la comunidad hispana en EE.UU. participan esta semana en la conferencia E2 sobre tecnología en la educación que Microsoft celebra en la capital francesa, donde han compartido con sus colegas internacionales sus avances en este campo.
“Matemáticas es la asignatura que más les cuesta a los estudiantes en Costa Rica. Hay alumnos cuya comprensión es más lenta y en el aula no pueden entender la explicación, lo que me llevó a desarrollar un método para recibirla en el móvil mediante un código QR”, explicó a Efe Danny González, profesor de matemáticas en Costa Rica.
González inició su proyecto en bachillerato en el Colegio Técnico Platanar, “una escuela rural en la que los estudiantes por lo general no disponen de recursos para pagarse profesores privados”, y los resultados han sido excelentes: en la promoción de 2016 aprobaron matemáticas el 49 % de los estudiantes; en el año 2017, el 71 %; y en el 2018, el 81 %.
“Mi idea fue hacer un examen simulacro que prepare a los estudiantes. Las preguntas del examen incorporan códigos QR de manera que, una vez terminados, los estudiantes pueden usar su teléfono móvil para escanear el código y recibir en su teléfono la respuesta correcta a cada pregunta con la correspondiente explicación”, indicó el educador.
Los estudiantes pueden consultar estas explicaciones desde casa, lo que les permite repasar la lección tantas veces como quieran, y algunas de ellas son vídeos colgados en Youtube, con lo que pueden pausarlos o reproducirlos dos, tres, o todas las veces que sea necesario.
“Es como tener al profesor sentado a tu lado todas las horas que necesites. La tecnología les permite repetir la lección en casa y profundizar en ella hasta que la comprendan del todo”, aseguró.
Otro de los docentes latinoamericanos que mostró en París cómo ha integrado la tecnología en clase fue el maestro de Español de la Escuela de Matemáticas, Ciencias y Tecnología (EMCT) de San Juan (Puerto Rico) Jan Carlos de la Paz Rivera, quien dirigió a sus alumnos en el proyecto “Lluvia, truenos, estragos y esperanza”.
En él, chicos y chicas de entre 16 y 17 años entrevistaron a sus compañeros que habían sufrido los efectos directos del huracán María (2017), plasmaron esas experiencias en un videodocumental y crearon una encuesta online para medir la empatía sobre el suceso mediante la plataforma Microsoft Forms.
En este último punto les asesoraron la psicóloga escolar y la trabajadora social del centro.
“Los estudiantes se sorprendieron. No se imaginaban que sus compañeros a quienes ven cada día habían pasado por estas situaciones. Teníamos casos en los que los hogares habían pedido el techo o el suelo. Eso hizo cambiar las percepciones”, indicó De La Paz a Efe.
El ejercicio no supuso sólo usar capacidades técnicas para crear el vídeo y la encuesta online, sino que también puso de relieve la importancia de usar la tecnología de forma “empática y humana”, ya que los estudiantes que habían compartido sus historias tenían que validar si efectivamente estas habían sido plasmadas tal y como ellos las habían contado.
Además de los adolescentes, los más pequeños también se pueden beneficiar de la entrada de ordenadores y tabletas en clase, como es el caso de la educación de primera infancia en el distrito escolar de Fontana (California, EE.UU.), donde el especialista en instrucción de tecnología José García está implementando el uso de la aplicación Flipgrid.
Se trata de una plataforma en la cual los maestros plantean preguntas a los párvulos, como por ejemplo “¿Con qué letra empieza tu nombre?”, y estos deben responder en un vídeo grabado por ellos mismos en las tabletas o computadoras como si fuese un “selfie”.
Todos estos vídeos aparecen en una lista bajo la pregunta formulada por el maestro y los estudiantes pueden ver los de sus compañeros y responderles, creándose así una conversación online entre ellos. EFE